martes, 16 de septiembre de 2014

Sobre el 9N en Catalunya


El 9 de noviembre de este año se quiere llevar a cabo una consulta soberanista en Cataluña, fomentada y dirigida por los sectores más reaccionarios de esta nación,  como son CIU y sus socios de ERC. Esta burguesía catalana está centrando todo su discurso en esta fecha en especial, confundiendo a la clase obrera y haciendo que parezca que lo realmente importante es única y exclusivamente la independencia de la nación y que esta será la mágica solución para nuestra clase y para el conjunto del pueblo catalán.

Hay que luchar contra la memoria selectiva que impera en este proceso, y por ello queremos recordar, por ejemplo, las Olimpiadas del 92 en Barcelona, ​​donde hubo una brutal represión contra el independentismo; torturas, control social, encarcelamientos... Y todo ello contaba con la participación de los que ahora son los máximos portavoces del chovinismo catalán, diciendo que quien saldría ganando sería la clase obrera, aunque posteriormente se volvió a demostrar que quienes salían beneficiándose eran los de siempre. De esta manera nos recuerdan al discurso que actualmente adoptan, siempre sumergiendo sus verdaderas intenciones.

Son los mismos que rechazan el derecho de autodeterminación de los pueblos como son el palestino y el kurdo. Y no se esconden al mostrar que el ejemplo de Israel, un estado fascista, es lo que quieren para Cataluña. Nosotros con esto queremos mostrar el oportunismo de la burguesía catalana, que se aprovecha de las circunstancias actuales para potenciar este nacionalismo tan rancio que en ningún caso nos beneficia como clase, más adelante desarrollaremos esta cuestión.


Como marxistas - leninistas entendemos que quien saldrá ganando en este caso es la burguesía.

Debemos hacer ver a la clase obrera que las intenciones de la burguesía catalana, al realizar esta consulta, no vienen de un sentimiento nacional herido basándose en la historia ni pretenden que salga ganando el pueblo catalán, sino que la burguesía sólo entiende que su clase mantenga y amplíe sus beneficios.

Se debe entender que no todo movimiento nacional es forzosamente revolucionario, como vemos en este caso en particular. Suponiendo que esta consulta saliera adelante y que Cataluña se convirtiera en un Estado independiente, debemos entender que un Estado es una herramienta de opresión de una clase sobre otra y que éste seguiría siendo burgués, pues sólo habría un cambio de gobierno y la clase obrera seguiría siendo la que sufre en el día a día las consecuencias del capitalismo incluso de una manera más dramática, porque un grueso de la población escondería estas penurias bajo el falso sentimiento nacional infundado.

No sería una victoria para la clase obrera, sería una acumulación de fuerzas para la clase dominante.

"Esto no significa, por supuesto, que el proletariado deba apoyar todo movimiento nacional, siempre y en todas partes, en todos y en cada uno de los casos concretos. De lo que se trata es de apoyar los movimientos nacionales encaminados a debilitar el imperialismo, a derrocarlo, y no a reforzarlo y mantenerlo. Hay casos en que los movimientos nacionales de determinados países oprimidos chocan con los intereses del desarrollo del movimiento proletario. Cae de su peso que en esos casos ni siquiera puede hablarse de apoyo. La cuestión de los derechos de las naciones no es una cuestión aislada, independiente, sino una parte de la cuestión general de la revolución proletaria, una parte supeditada al todo y que debe ser enfocada desde el punto de vista del todo. "
I. Stalin.


Desde que se dio a conocer esta consulta hemos sido conscientes del auge de sentimiento chovinista que está viviendo Cataluña y de cómo la clase obrera, deslumbrada con falsas esperanzas, adopta desgraciadamente su discurso.

También podemos ver cómo organizaciones que se autodenominan socialistas se suman a lo que viene dictado por la burguesía catalana. Éstas afirman que son críticas con el proceso, pero que igualmente asistirán a las urnas para hacer patente su voluntad. ¿Cómo puede ser que seas crítico con algo y aun así sumes tus fuerzas a este proceso? Podríamos afirmar que lo que se está haciendo desde estos sectores más izquierdistas es seguidismo. Estas organizaciones no comprenden que lo que se está llevando a cabo restará fuerzas a la clase obrera, como ya hemos dicho anteriormente, y se suman a ello de manera reformista. No las podemos calificar ni siquiera de revisionistas ya que no son ni socialistas.  Utilizan consignas confusas como es la de Independencia para cambiarlo todo; primero la independencia, aprovechando el auge nacional y aquello que viene dado por la burguesía catalana, y posteriormente por un “socialismo” aún más confuso. Dentro del capitalismo no hay forma posible de resolver los conflictos nacionales, como tampoco podemos romper con la explotación que sufre nuestra clase. De todos modos, está claro que estas organizaciones "izquierdistas" reformistas se suman a cualquier iniciativa que satisfaga su sentimiento nacional, no teniendo en cuenta (o sí), que dan fuerza y ​​perpetúan el imperialismo.

“Antes, la cuestión nacional se enfocaba de un modo reformista, como una cuestión aislada, independiente, sin relación alguna con la cuestión general del Poder del capital, del derrocamiento del imperialismo, de la revolución proletaria. Dábase tácitamente por supuesto que la victoria del proletariado de Europa era posible sin una alianza directa con el movimiento de liberación de las colonias, que la cuestión nacional y colonial podía resolverse a la chita callando, «de por sí», al margen de la vía magna de la revolución proletaria, sin una lucha revolucionaria contra el imperialismo. Ahora, este punto de vista antirrevolucionario debe considerarse desenmascarado. El leninismo demostró, y la guerra imperialista y la revolución en Rusia lo han corroborado, que el problema nacional sólo puede resolverse en relación con la revolución proletaria y sobre la base de ella; que el camino del triunfo de la revolución en el Occidente pasa a través de la alianza revolucionaria con el movimiento de liberación de las colonias y de los países dependientes contra el imperialismo. La cuestión nacional es una parte de la cuestión general de la revolución proletaria, una parte de la cuestión de la dictadura del proletariado.

I. Stalin.

Como se entendía antes es como lo siguen entendiendo estas organizaciones reformistas, que dividen la lucha en diferentes luchas parciales pudiendo así crecer cuantitativamente. Como se entiende ahora es como lo entendemos los marxistas-leninistas, que en ningún momento dividimos la lucha sino que entendemos que la cuestión nacional forma parte de la lucha de clases, de la revolución proletaria.

También podemos entrar a hablar de otro hecho como es el de engañar a la clase obrera haciéndole creer que mediante las elecciones pueden cambiar sus condiciones. Mediante una urna, el único cambio que se realiza es un cambio de gobierno ya que, como bien dijo Engels, “el sufragio universal es el índice de la madurez de la clase obrera y no puede llegar ni llegará nunca a ser más en el Estado actual”. Las democracias burguesas lo tienen todo bajo control y ninguna votación hará tambalear sus estructuras. Hay que ir con la verdad por delante y hacer ver a la clase obrera que conquistará el poder únicamente mediante la revolución proletaria. Esto no quiere decir que estemos en contra de todas las elecciones, pues si no caeríamos en el izquierdismo, pero sí que sabemos analizar cuáles son las condiciones materiales adecuadas y si éstas representan un avance o no para la clase obrera y, por tanto, no nos sumamos a cualquier iniciativa de manera oportunista y revisionista, como sí hacen otros.

"Solo los canallas o los bobos pueden creer que el proletariado debe primero conquistar la mayoría en las votacionesrealizadas bajo el yugo de la burguesía, bajo el yugo de la esclavitud asalariada, y que solo después debe conquistar el poder. Eso es el colmo de la estulticia o de la hipocresía, esto es sustituir la lucha de clases y la revolución por votacionesbajo el viejo régimen, bajo el viejo poder."
V.I. Lenin.

Queremos remarcar nuestra firme oposición al españolismo y, por tanto, no queremos sumar fuerzas con su imperialismo. Por esto, es necesario concienciar a la clase obrera tanto del país opresor como de las naciones y pueblos oprimidos de que luchando contra el enemigo común (el capitalismo)  podrán encontrar su plena independencia. Únicamente bajo el marco de respeto mutuo podrá haber la unión libre y voluntaria de todos los pueblos.


Desde Reconstrucción Comunista entendemos, como marxistas-leninistas, que toda acción que enajene y debilite a la clase obrera debe ser boicoteada, ya que la clase obrera debe tener claro que sólo en el socialismo, como bien dijo Lenin, puede darse la plena independencia de las naciones. Por tanto, únicamente apoyaremos aquellos movimientos de liberación nacional realmente revolucionarios que representen un avance para la clase obrera. Actualmente, el camino que está tomando divide y flaquea, como se ha expuesto con anterioridad. Por ello, no sumaremos fuerzas en este proceso ni caminaremos de la mano de la burguesía catalana (ni de ninguna otra), pues este proceso perjudica a nuestra clase y somos conscientes de que apoyándolo  nos estaríamos convirtiendo en traidores y seríamos cómplices del mismo, cayendo en el seguidismo.

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El 9 de novembre d’aquest any es vol dur a terme una consulta sobiranista a Catalunya fomentada i dirigida pels sectors més reaccionaris d’aquesta nació, com són CIU i els seus socis d’ERC. Aquesta burgesia catalana està centrant tot el seu discurs en aquesta data en especial, confonent a la classe obrera i fent que sembli que el que realment és important única i exclusivament la independència de la nació i que aquesta serà la màgica solució per a la nostra classe i pel conjunt del poble català.



Cal lluitar contra la memòria selectiva que impera en aquest procés. Volem recordar, per exemple, les Olimpíades del 92 a Barcelona, on hi va haver una brutal repressió contra l’independentisme; tortures, control social, empresonaments... I tot això comptava amb la participació dels qui ara són els màxims portaveus dels xovinisme català, què deien que qui sortiria guanyant seria la classe obrera, tot i que posteriorment es va tornar a demostrar que els qui sortien beneficiant-se eren els de sempre. D’aquesta manera, ens recorden al discurs que actualment adopten, sempre submergint les seves veritables intencions.

Són els mateixos que rebutgen el dret d’autodeterminació dels pobles com són el palestí i el kurd. I no s’amaguen en mostrar que l’exemple d’Israel, un estat feixista, és el que volen per a Catalunya. Nosaltres, amb això, volem mostrar l’oportunisme de la burgesia catalana, que s’aprofita de les circumstàncies actuals per a potenciar aquest nacionalisme més ranci, que en cap cas ens beneficia com a classe, més a endavant desenvoluparem aquesta qüestió.




Com a marxistes – leninistes entenem que qui sortirà guanyant en aquest cas és la burgesia. Hem de fer veure a la classe obrera que les intencions de la burgesia catalana, en realitzar aquesta consulta, no són per un sentiment nacional ferit basat en la història o perquè busquin que surti guanyant el poble català, sinó que la burgesia només entén de que la seva classe mantingui i amplií els seus beneficis.

S’ha d’entendre que no tot moviment nacional és forçosament revolucionari, com veiem en aquest cas en particular. Suposant que aquesta consulta tirés endavant i que Catalunya esdevingués un Estat independent, hem d’entendre que un Estat és una eina d’opressió d’una classe sobre una altra i que aquest seguiria sent burgés, on només hi hauria un canvi de govern i la classe obrera seguiria sent la que pateix al dia a dia les conseqüències del capitalisme, fins i tot d’una manera més dramàtica ja que un gruix de la població amagaria aquestes penúries sota el fals sentiment nacional infundat.

No seria una victòria per a la classe obrera, seria una acumulació de forces per a la classe dominant.



“Això no vol dir, és clar, que el proletariat tingui que recolzar tot moviment nacional, sempre i a tot arreu, en tots i en cadascun dels casos concrets. Del que es tracta és de donar suport als moviments nacionals encaminats a debilitar l'imperialisme, a enderrocar, i no a reforçar-lo i mantenir-lo. Hi ha casos en què els moviments nacionals de determinats països oprimits xoquen amb els interessos del desenvolupament del moviment proletari. Cau del seu pes que en aquests casos ni tan sols es pot parlar de suport. La qüestió dels drets de les nacions no és una qüestió aïllada, independent, sinó una part de la qüestió general de la revolució proletària, una part supeditada al tot i que ha de ser enfocada des del punt de vista del tot.”

I. Stalin.



Des que es va donar a conèixer aquesta consulta hem sigut conscients d’aquest auge de sentiment xovinista que està vivint Catalunya, i de com la classe obrera enlluernada amb falses esperances adopta, malauradament, el seu discurs.

També podem veure com organitzacions que s’autodenominen socialistes es sumen al que ve dictat per la burgesia catalana. Aquestes afirmen que són crítiques amb el procés, però que igualment assistiran a les urnes per fer palès la seva voluntat. Com pot ser que siguis crític amb quelcom i tot i així sumis les teves forces a aquest procés? Podríem afirmar que el que s’està fent des d’aquests sectors més esquerranosos és seguidisme. Aquestes organitzacions no comprenen que el que s’està duent a terme restarà forces a la classe obrera (com ja hem dit anteriorment) i es sumen de manera reformista. No les podem qualificar ni de revisionistes ja que ni tan sols són socialistes, amb consignes confoses com és la de Independència per canviar-ho tot; primer la independència, aprofitant l’auge nacional i el que ve donat per la burgesia catalana, i posteriorment per un “socialisme” encara més confós. Dintre del capitalisme no hi ha forma possible de resoldre els conflictes nacionals, com tampoc podem trencar amb l’explotació que pateix la nostra classe. Però està clar que aquestes organitzacions esquerranoses i reformistes es sumen a quelcom que satisfaci el seu sentiment nacional, sense tenir en compte (o si) que donen força i perpetuen l’imperialisme.



Abans, la qüestió nacional s'enfocava d'una manera reformista, com una qüestió aïllada, independent, sense cap relació amb la qüestió general del Poder del capital, l'enderrocament de l'imperialisme, de la revolució proletària. Es donava tàcitament per descomptat que la victòria del proletariat d'Europa era possible sense una aliança directa amb el moviment d'alliberament de les colònies, que la qüestió nacional i colonial podia resoldre a la callada, "de per si", al marge de la via magna de la revolució proletària, sense una lluita revolucionària contra l'imperialisme. Ara, aquest punt de vista antirevolucionari s'ha de considerar desemmascarat. El leninisme va demostrar, i la guerra imperialista i la revolució a Rússia ho han corroborat, que la qüestió nacional només pot resoldre en relació amb la revolució proletària i sobre la base d'ella; que el camí del triomf de la revolució a l'Occident passa a través de l'aliança revolucionària amb el moviment d'alliberament de les colònies i dels països dependents contra l'imperialisme. La qüestió nacional és una part de la qüestió general de la revolució proletària, una part de la qüestió de la dictadura del proletariat.

I. Stalin.



Com s’entenia abans és com ho segueixen entenent aquestes organitzacions reformistes, que divideixen la lluita en diferents lluites parcials podent així créixer quantitativament. Com s’entén ara és com ho entenem els marxistes – leninistes, que en cap moment dividim la lluita sinó que entenem que la qüestió nacional forma part de la lluita de classes, de la revolució proletària.



També podem entrar a parlar d’un altre fet com és el d’enganyar  la classe obrera fent-la creure que mitjançant les eleccions poden canviar les seves condicions. Mitjançant una urna l’únic canvi que es realitza és un canvi de govern, ja que com bé va dir Engels, el sufragi universal és l'índex de la maduresa de la classe obrera i no pot arribar ni arribarà mai a més en l'Estat actual. Les democràcies burgeses tenen tot sota control, i cap votació farà trontollar les seves estructures. S’ha d’anar amb la veritat per davant i dir a la classe obrera que conquerirà el poder només mitjançant la revolució proletària. Això no vol dir que estiguem en contra de totes les eleccions, si no cauríem en l’esquerranisme, però si que sabem analitzar quines són les condicions materials adequades; si representen un avanç o no per a la classe obrera. Per tant, no ens sumem a qualsevol iniciativa d’una manera oportunista i revisionista, com d’altres.



"Només els canalles o els babaus poden creure que el proletariat ha de primer conquerir la majoria en les votacions realitzades sota el jou de la burgesia, sota el jou de l'esclavitud assalariada, i que només després ha de conquerir el poder. Això és el súmmum de l'estultícia o de la hipocresia, això és substituir la lluita de classes i la revolució per votacions sota el vell règim, sota el vell poder.”

V.I. Lenin.



Volem remarcar la nostra ferma oposició a l’espanyolisme, i per tant no volem sumar forces amb el seu imperialisme. Per això és necessari conscienciar a la classe obrera tant del país opressor com de les nacions i pobles oprimits de que lluitant contra l’enemic comú (el capitalisme) podran trobar la seva plena independència. Només sota el marc de respecte mutu podrà haver-hi la unió lliure i voluntària de tots els pobles.



Des de Reconstrucció Comunista entenem que, com a marxistes – leninistes, tota acció que alieni i afebleixi a la classe obrera ha de ser boicotejada. Perquè la classe obrera ha de tenir clar que només en el socialisme, com va dir Lenin, pot donar-se la plena independència de les nacions. Per tant, només recolzarem aquells moviments d’alliberament nacional realment revolucionaris que representin un avanç per la classe obrera. Actualment, el camí que s’està prenent divideix i flaqueja, com hem exposat anteriorment. Per això, no sumarem forces a aquest procés ni caminarem de la mà de la burgesia catalana (ni de la de cap lloc),  ja que aquest procés perjudica a la nostra classe i som conscients que ens estaríem tornant uns traïdors i seriem còmplices d’aquest, caient en el seguidisme.